Solicitada de Silvio Canosa.


Ante diversas notas periodísticas en donde el Secretario de Gobierno continúa con sus aprietes, acosos y persecuciones hacia mi persona con el único fin de obtener mi renuncia, me veo en la necesidad de contestar sus temerarios y falaces comentarios.
Dice que “estoy bombardeando la gestión del gobierno”, que le pongo “palos en la rueda”, y que “no lo ayudo a resolver los problemas”.
Quiero expresar que me han quitado personal, que me han cambiado empleados con 28 años de antigüedad en el Juzgado por gente que ni siquiera prestaba tareas administrativas; que he estado 15 días con 4 de 5 impresoras inutilizables por falta de insumos; y el estado deplorable de mantenimiento del Juzgado se comprueba con una simple vista. Mientras tanto, sigo actuando y resolviendo en las causas de la misma forma desde que asumí el cargo, hace ya casi 4 años. Entonces me pregunto: ¿quién es el que pone palos en la rueda?
Por otro lado, “sólo” estoy para juzgar, no para ayudar al Ejecutivo como pretende Giralde, ya que ello implicaría poner en una situación de desigualdad o desprotección a un ciudadano. Juzgo tanto la actuación de un presunto infractor, como la del personal municipal que labra el acta respectiva.
Sostiene el Secretario al final de la nota que le brindara al semanario La Palabra el pasado 28 de abril que “cualquier cosa en contra que el Dr. Canosa pueda decir, carece de fundamentos”, expresión que denota un grado de autoritarismo alarmante. Y al respecto le digo que sólo me fundo en una cosa: LA LEY.
Por último quiero referirme a dos situaciones a las que el Sr. Giralde hace referencia: la primera es el tema de las motos y el tránsito. Haciendo alarde de un profundo desconocimiento de la materia e ignorancia de las normas aplicables, sostiene que no aplico multas severas en determinadas situaciones como por ejemplo “las picadas”, cuando hacen “Willy”, o cuando tienen un caño de escape ruidoso. Quiero poner en conocimiento de la población, que de tratarse de una “picada” difícilmente pueda aplicarle una multa ejemplificadora como reclama el funcionario, ya que se trata de un delito, tipificado así por el art. 193 bis de Cód. Penal, siendo competente la Justicia Penal, es decir que ni siquiera puedo intervenir en su juzgamiento.
Le recuerdo al Secretario que participé en todos los decomisos de caños de escapes realizados en el partido de Lobos, ya que se trata de un procedimiento ideado por mí junto a la anterior Jueza de Faltas, la Dra. Canale. No existe moto secuestrada que sea entregada si no es puesta en condiciones de circular: se le exige acreditar la titularidad, el cambio de caño de escape, comprobante de seguro, licencia de conducir, etc. La multa mínima por escape libre asciende hoy a la suma de $4779 (sin el descuento de pago voluntario), lo que le parece poco al sr. Secretario, queriendo imponerme el tipo y monto de sanción que debo aplicar, intentando avasallar la autonomía del Juzgado. Además anunció la redacción de una ordenanza para “endurecer las multas a las motos” que establecen las Leyes Nacional y Provincial de Tránsito, desconociendo un principio básico del derecho que es que una norma inferior (ordenanza) no puede modificar lo establecido en una norma de rango superior (Ley Nacional o Provincial).
Ahora yo me pregunto en estos casi 40 días que lleva Giralde a cargo del área de tránsito: ¿cuántos secuestros por escapes libres realizó?, o ¿cuántas infracciones por hacer “Willy”?. Pongo a disposición de quien quiera saberlo los libros de actas del Juzgado (se llevará una gran sorpresa).
Párrafo aparte merece el incidente con el “Chanta 4”.
El Secretario de Gobierno y el Director de Inspección General, autorizaron bailes en el club, pretendiendo imponerle un límite horario arbitrario e ilegal (que cierren a la 1 de la mañana), mientras que las normas jurídicas aplicables al caso que son la Ley Provincial 14.050 y la Ordenanza 2400, fijan el horario de cierre a las 5,30 y 5 horas respectivamente, razón por la cual fallé a favor del particular. Y en la ronda mediática que realizaron, muestran un profundo desconocimiento al Estado de Derecho diciendo que siguen actuando de la misma manera a pesar de que la ley se los prohíbe.
Si no les gustan las normas vigentes, propicien su modificación, no su violación.
Luego intentaron hacerme cargo que el club estuviese abierto cuando una persona sufrió una lesión en dicho lugar. Yo no otorgo autorizaciones ni habilitaciones, fueron ellos quienes lo hicieron. Es más, si el Secretario y el Director General hubiesen actuado conforme a derecho, deberían haber clausurado el lugar preventivamente.
Yo me pregunto ¿cómo es que se otorgaron esos permisos que les impidió clausurar el lugar? Los concejales y hasta el fiscal interviniente en la causa penal por las lesiones sufridas por la persona asistente al baile, debieran hacerse la misma pregunta. Creo que posiblemente se encontrarían con la comisión de un delito.-
Silvio Canosa- Juez de Faltas
DNI: 24.421.401

Muy bueno el comentario y la música de Lucas Prodan.