Desarrollan en la UNLP un sensor ultrasensible y de bajo costo para evitar el descarte masivo de cítricos por exceso de pesticidas.

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Científicos del INIFTA-CONICET lograron crear un dispositivo portátil que detecta en tiempo real residuos peligrosos como el imazalil (IMZ), reduciendo pérdidas de hasta el 60% en la producción y garantizando la seguridad alimentaria.

​Un avance crucial para la agroindustria citrícola ha sido desarrollado por investigadores de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP). Un grupo del Laboratorio de Materia Blanda del Instituto de Investigaciones Fisicoquímicas Teóricas y Aplicadas (INIFTA–UNLP–CONICET) construyó un sensor impedimétrico de bajo costo y alta sensibilidad, capaz de medir en el sitio de interés la presencia de residuos de pesticidas peligrosos, como el fungicida imazalil (IMZ).

​Solución a un alto nivel de descarte

​Según la información de la UNLP, el objetivo de este desarrollo es proporcionar una solución más accesible, económica y eficiente para los productores. Actualmente, la producción de cítricos se ve negativamente impactada por el uso excesivo de agroquímicos, estimándose que las pérdidas por esta causa superan el 60% de las frutas analizadas en laboratorios de distribución. Este descarte no solo representa un perjuicio económico para una actividad que en Argentina se valúa en más de mil millones de dólares, sino que también implica un riesgo de consumo no seguro.

​Los investigadores Jimena Tuninetti y Matías Rafti explicaron que el dispositivo, del tamaño de una moneda, permite medir la presencia de pesticidas de forma fácil, muy rápida y a un costo mucho menor que las técnicas analíticas tradicionales de laboratorio. Esta capacidad de medición rápida en el sitio de interés —ya sea al cosechar, en el post-lavado, o en centros de distribución— permitiría a los productores tomar decisiones informadas para liberar su producto al mercado cumpliendo con los límites permitidos, mejorando así los rindes y minimizando el desperdicio.

​La tecnología detrás del sensor

​El sensor utiliza una tecnología novedosa que garantiza bajos costos, alta sensibilidad y facilidad de uso. Está fabricado con nanocristales de Redes Metal-Orgánicas (MOF), elegidos por su gran capacidad de adsorción y afinidad por el pesticida IMZ, inmovilizados dentro de una capa de un polímero conductor (PEDOT) sobre un sustrato de soporte de polietileno (PET) de bajo costo.

​El fungicida IMZ es de uso común para combatir el hongo Penicillium, principal causa de pérdida de calidad en la post-cosecha de cítricos. Sin embargo, su uso intensivo ha generado preocupación, ya que la Organización Mundial de la Salud (OMS) lo clasifica como clase II (moderadamente peligroso), y la ingesta crónica de alimentos contaminados con este residuo representa un riesgo potencial para la salud humana.

​Actualmente, el equipo de investigación avanza en el desarrollo del módulo electrónico de medición y el software acoplado para poner el sensor en funcionamiento. La proyección a futuro incluye la posibilidad de crear sensores multipropósito y lograr su inserción en diferentes mercados de relevancia económica.

Fuente: Universidad Nacional de La Plata (UNLP).

https://unlp.edu.ar/investiga/cienciaenaccion/desarrollan-un-sensor-que-evita-el-desperdicio-de-citricos-por-exceso-de-pesticidas-116602/

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